“Shanzhai”, la copia

“Shanzhai”, la copia

Las fotografías suplantan un recuerdo inexistente. Esto es, son una copia de un original inalcanzable, secreto, de una pérdida.

Y cuando ese implante remueve una historia sin inicio, así, lo gana. No es esencial la supuesta realidad de ese aporte, de esa copia, de esa invención. Lo esencial descansa en el hecho de que ese “cenote” pueda ser rodeado para continuar relatando historias en lugar de repetirlas.

Hay un concepto en el arte chino que explica en cierto modo este proceso: shanzhai. Copiar una historia sobre un original “casual” para tener la oportunidad de re-crear una obra nueva…o quizá mejor.

Algo así como conseguir —si fuese el caso, y no necesariamente— un acceso a la verdad a través del “fake”.

Toda fotografía transporta un fake fundacional, potencial. De ahí su capacidad para revolucionar una historia, a veces, olvidada.

 

“Shanzhai, la copia” © J. Bengoetxea 2019